viernes, marzo 24, 2017

Ese Gran Final... Luigi's Mansion 2



Después de una larga pantalla, descubrimos donde se encuentra el último fragmento de la Luna Oscura. Está en la sala ferroviaria de la Mansión Traicionera, y tiene a Mario encerrado en un cuadro.

¿En serio? ¿Exactamente el mismo argumento que en el primer titulo? Este juego tiene ideas bastante interesantes como el desoscurizador y los entes supremos, ¿y a nadie se le ha ocurrido un argumento nuevo, por simple que fuera, para esta entrega? Además es que es Mario. Parece que tiene que salir en todas partes para hacer sombra a los demás... Esto es Luigi's Mansion y no necesitamos a Mario para nada. Sólo espero que al menos no se transforme en Bowser.

Entramos a la sala ferroviaria. No ocurre nada. Hay que investigar. Bien, por lo menos hay que comerse un poco el coco para avanzar. No se tarda en apreciar una columna de humo que sale de la nada. Activamos el desoscurizador e inmediatamente aparece la locomotora del tren, que por cierto tiene una taladradora acoplada al frente. De pronto aparece Boo, pero uno normal, no el Rey Boo, se fusiona con un montón de colegas suyos hasta convertirse en un Boo gigante que promete literalmente, aplastarte.


Bueno, esto mejora. Ahora sabemos que mínimo hay dos Jefes Finales. Hasta ahora, los Boos se derrotaban con el desoscurizador, pero estoy probando y no funciona. Tampoco consigo mucho pegándole el destellazo con la linterna. Se va para atrás, sí, pero no tiene pinta de funcionar. El tren está dando vueltas por ahí con la taladradora girando, me imagino que habrá que pincharle de algún modo, pero no encuentro la forma de que baje la guardia y absorberlo de primeras evidentemente no consigue nada. Lo único que está pasando es que me está reventando porque el amigo quita 20 cada vez que te toca.


Vale, era mucho más sencillo que todo eso. Él solito se estampa contra el suelo varias veces hasta cansarse y sacar la lengua. Si me hubiese dedicado a esquivarle en lugar de ponerme en medio para tratar de darle con la linterna en la cara lo habría descubierto antes...

Cuando le coges de la lengua, estiras, y al soltarle, se pierde por la pantalla o se estrella contra el tren, pero al contrario que los otros Boos que hemos visto durante el juego, no empieza a rebotar como un loco. Hay que hacer algo más, y ahora sí está claro que. Lo tiramos contra al taladradora y ahora sí, se rompe la fusión.


Se ve que la cosa no acaba aquí. No puedes coger a los Boos pequeños con la aspiradora y fuera. Tienes las mismas opciones que con el grande, tirarles de la lengua. Han aparecido una extrañas dianas en el tren, parece una señal bastante clara.

En efecto, al disparar los Boos contra las dianas los encierras en las jaulas del tren. Lo malo es que hay que hacerlo con los diez que forman el grande. Paciencia, nada más. No es para nada sencillo. El espacio es muy reducido. Depende del ángulo puedes no tener espacio para estirarte lo suficiente en la dirección a la que está el tren, se vuelven a fusionar enseguida, y según quedan menos te dan menos tiempo entre fusión y fusión.


Tras encerrarlos a todos, se acaba la pantalla. El profesor te trae de vuelta, y vamos a una nueva pantalla. Aparecemos en la terraza. El Rey Boo invoca un portal dimensional del que salen mogollón de fantasmas para luego entrar él dentro. Lo normal sería ir detrás de él, pero el profesor te detiene, alertando de altos niveles de energía paranormal.


Pues nada, toca un poco de relleno. Por suerte, los fantasmas están recogidos en habitaciones concretas y separados por tipo. Los verdes están en una habitación, los rojos en otra, los azules en otra, y así.


Esta es una de las cosas en las que esta entrega ha cambiado más. Antes, cuando entrabas en una habitación, había un fantasma único en cada una, como el hombre que leía un libro en la mecedora, o la mujer que se estaba dando un baño, y con cada uno tenías que partirte la cabeza para descubrir su punto débil, exponer su corazón y absorberle. Ahora hay cuatro o cinco tipos de fantasmas genéricos y hay a patadas de cada uno. Incluso el jefe de cada mansión es genérico, lo que es el fantasma en sí. Tan sólo le van añadiendo un cuerno más según avanzas.

Parece que esto del relleno con los fantasmas genéricos no va a ser tan sencillo. Es un modo contrarreloj camuflado. Si no limpias pronto las habitaciones. el nivel de energía paranormal general de la mansión aumenta. El color de las habitaciones con fantasmas marcadas en el mapa pasa primero de verde a naranja para después volverse rojo. Si eso ocurre, es entonces cuando el contrarreloj se vuelve visible, con una maravillosa cuenta atrás de tres minutos. Por suerte, no son tres minutos para terminar del todo, simplemente para reducir los niveles a naranja. Con terminar rápido la habitación actual y si eso, algo de la siguiente, es suficiente.


No voy a explicar todas las habitaciones, no tienen nada de especial, es hacer lo que llevamos haciendo todo el juego sólo que con prisas. Cuando limpiamos todas, nos vuelven a citar en la terraza, pero para nuestra sorpresa, en lugar de entrar para perseguir al Rey Boo, salen todavía más fantasmas, ¡y esta vez de todos los tipos!


Aquí la cosa se complica y bastante. Mientras estás absorbiendo a un fantasma azul, por ejemplo, uno verde intenta arrearte un puñetazo, o lo que más me cabrea, uno morado de esos que parecen un Haunter aparece por detrás y te da un susto, jodiéndote el combo. Cada fantasma tiene su propio modus operandi, y aunque por separado, o al menos por tipo, no son mayor problema, todos juntos y encima en estas cantidades son un auténtico dolor en el culo. Pero bueno, estamos al final, y hay que darlo todo. ¡A por ellos!


Tras una larga batalla en la que llegué a pensar que no se acabarían nunca, me encuentro con una pequeña sorpresa. La última vez me había quedado a 11 monedas del último upgrade de la aspiradora, me la acaban de dar, y pone que ahora los fantasmas se absorben más rápido. Me da que el juego tenía pensado que fuese a la lluvia de fantasmas con ese upgrade ya conseguido, pero la verdad, ha estado bien. Cuando las cosas cuestan, el sabor de boca que te queda luego es mucho más satisfactorio.

Sigamos. Última pantalla, o al menos, eso espero, porque empiezo a pensar que he vuelto a precipitarme al empezar la entrada. Por lo menos, lo primero que ocurre al empezar es que el propio portal absorbe a Luigi a su interior.


Pensaba que íbamos a terminar en un espacio dimensional sin forma concreta, flotando por el aire o algo así, pero no, llegamos a otra mansión nueva, que por lo menos parece que no va a tocar explorarla entera, porque tenemos el último fragmento de la luna oscura. Pero cuando vamos a coger, ¡aparece el jefe de la mazmorra!


Así es, el de los cinco cuernos. Yo pensaba que iba a ser directamente el Rey Boo pero no. Otro más. Por una parte, el final empieza a ser demasiado largo como para ser considerado todo el final en sí, pero por otro lado, estoy seguro de que el combate va a ser tan original y entretenido como los anteriores.

El fantasma se divide en dos, y ambos poseen cada uno una de las armaduras de la sala. Hay alfombras sospechosas en el suelo de la habitación, así que parece todo bastante claro esta vez. Como las momias, sólo que en vez de tirarles cegándoles con la linterna, retirando la alfombra cuando estés encima. Vaya chorrada.


Vale, he tirado a uno y efectivamente, se cae y la armadura se desarma, pero inmediatamente se regenera. No es tan sencillo (hala, por hablar xD). Cuando se cae, el otro como que carga una bola de energía en la mano, pero para en cuanto se arregla el otro. Claro, ya entiendo, uno arregla al otro, no era una bola de energía, era un hechizo. Pues, nada, tiramos a los dos y fuera.

Efectivamente, si tiramos a los dos a la vez, los fantasmas salen de las armaduras, y además se rompe la división, vuelve a tener un sólo cuerpo y ya podemos absorberle.


Estos fantasmas tienen, como decirlo, varias capas, y no se pueden absorber de una vez. Al quitarle la primera capa, se divide ahora en tres fantasmas y ocupan tres armaduras en vez de dos. Pero bueno, el proceso es el mismo. Además, se mueven bastante rápido por lo que no tardas nada en atraerlos y tirar de la alfombra para que se caigan.

Al quitarle la segunda capa, se vuelve a dividir, ahora en cuatro fantasmas, pero en lugar de ocupar cuatro armaduras pequeñas, ocupan una grande, gigante más bien. Una tan grande que sólo se le ven los pies, y la punta de la espada, cuando intenta atacarte con ella.


La historia se repite. Ahora es lento, y es raro que no tenga un pie en una alfombra, pero al intentar tirarle, salta una cinemática, así como para hacernos creer que lo hemos conseguido, pero no. Simplemente es para indicar que tenemos unos segundos para tirarle la otra pierna, y si no, recupera el equilibrio y vuelve a posar los dos pies.


Conseguir que pusiera los dos pies en la alfombra ya sí me ha costado ahora un poquito más, porque además de que es lento y hace un poco lo que le da la gana, también tienes que andas esquivando los escombros que caen del techo, la espadita de las narices, y sus propios pisotones, pero reconozco que mi falta de paciencia también ha contribuido a agravar la dificultad. Al tirarle las dos piernas, finalmente se cae y puedes absorber al fantasma completamente, recuperando el fragmento de la luna oscura.


Hala, llamadita del profesor y a casita otra vez. Otra pantalla más... Pero en mitad de lamentos e improperios, me di cuenta de que había algo raro. El fondo de la pantalla de carga, que simula a Luigi siendo transferido, había cambiado de su característico verde a un morado oscuro y tenebroso.


Efectivamente, cuando se completa el transporte, lo único que aparece es el fragmento de la luna oscura, pero no hay ni rastro de Luigi. El profesor da un sobresalto al descubrirlo.


Luigi ha sido atrapado en otra dimensión, y finalmente, se ve cara a cara con el Rey Boo. Gracias a su nueva corona, que ahora es morada cuando en el otro juego era roja, consiguió romper la luna oscura para controlar a todos los fantasmas, y tras controlar a los muertos, es el momento de conquistar también a los vivos.


Como mola el nuevo diseño del Rey Boo. Es mucho más fiero, mucho más oscuro. Casi podría ser Majin Boo xD Analicemos la situación. Nos encontramos en una pequeña plataforma. Boo aparece y desaparece a sus anchas, se estrella contra el suelo y provoca una pequeña onda expansiva alrededor, tira bolas de pinchos gigantes. y la linterna, aunque le hace efecto, no le causa daño, solo le paraliza, porque se cubre con las manitas.


El desoscurizador tampoco funciona. Se me ocurrió intentar coger una de las bolas de pinchos parar tirársela a la cara como en el primer juego, pero tampoco. Si tocas las bolas se rompen y te hacen cinco de daño. Al menos es poquito, pero en esa plataforma tan reducida, te va cayendo una hostia tras otra y ni te enteras.

¿Qué hay que hacer? Pues bueno, confieso que lo descubrí por casualidad. Cuando caen las bolas de pinchos, no lo hacen inmediatamente. Aparece una sombra que va creciendo y además se toma su tiempo, antes de que finalmente la bola haga aparición. Dio la casualidad de que Boo pasó por ahí en el momento justo y le cayó la bola, pero oficialmente tienes que atraerle tú y luego paralizarle con la linterna para asegurar el impacto.


Es entonces cuando se queda atontado unos segundos y puedes aprovechar para absorberle. Sólo tiene 100 de vida, qué raro. Y además, con el turbo del último upgrade entra casi solo y le he pillado de una tacada. ¿De verdad se va a acabar así?

Salta una cinemática. Luigi absorbe a Boo, pero la corona no entra por el agujero, se queda atascada, para finalmente volver a dejar a Boo libre. ¡Sí! ¡Sí, joder, sí! ¡Esto sigue!


Ahora hay una especie de minijuego. Boo crea el pasillo de una mansion, te mete dentro y hay que hacer una carrerita de obstáculos. Él te persigue rodando y mientras hay estanterías, cajones, armaduras y demás objetos por el camino, obligándote a ir en zigzag para avanzar. De hecho, es demasiado y a veces te coge, pero no pasa nada, te quita otros cinco de vida y sigues.


Al salir del pasillo, se cierra el ciclo y volvemos a empezar. vale, entonces ya está claro como va a terminar esto. Será la regla de Nintendo de siempre. Pero bueno, mientras tanto, Boo va aumentando su repertorio de ataques. Ahora tira rayos sobre la plataforma, también coloca arena, hielo y demás para dificultarte un poco tu labor.


También pasa una cosa que realmente estaba desde el principio, pero que no había notado hasta ahora. La plataforma se inclina hacia el lado al que te mueves. Es decir, si te mueves a la izquierda, el lado izquierdo se hunde, entonces las bolas de pinchos ruedan automáticamente hacia ti. No sé como las evité la primera vez, pero las dos siguientes eso ha sido un verdadero problema. Por lo demás, nada más que añadir, a darle duro, y a disfrutar del juego, que ya se acaba.


A la tercera, finalmente la corona pasa por el agujero y capturas a Boo. la verdad, no tiene mucho sentido que ahora sí entre, pero bueno, es Nintendo, no se puede exigir el argumento de Zero Escape. Luigi utiliza el desoscurizador para sacar a Mario del cuadro, que está totalmente de relleno en la presentación final, nadie le he invitado. Depsués, restauran la luna oscura y todos los fantasmas se vuelven buenos y se hacen una foto todos juntos, que Luigi cuelga en su habitación. Fin.


Increíble. Yo creo que, quitando The Legend of Zelda, es el mejor final que he visto nunca en un juego de Nintendo. Jugablemente es difícil sacarle alguna pega, tal vez que no hayan sabido darle algún uso al desoscurizador, pero nada más. Argumentalmente ya no es lo mismo. Desde el hecho de meter a Mario con calzador, a que no te expliquen nada de la corona esa tan poderosa que había conseguido Boo, llegando incluso al punto de decir que la naturaleza de los fantasmas es amigable y simpática, lo que echaría por tierra todo el argumento del título de Gamecube. Pero bueno, vamos a pensar que son fantasmas distintos con naturalezas distintas. Ha estado muy bien, y me duele no haber podido pasármelo antes por culpa de que me fallase el botón R (el que se usa para aspirar) mas cuando este juego fue un regalo. Al menos ha merecido la pena la espera.

Valoración Global del Final
Perfecto
Casi Perfecto
Muy Bueno
Bastante Bueno
Bueno
Aceptable
Malo
Bastante Malo
Muy Malo
Un Desastre

8 comentarios:

  1. Para mi terrible planteamiento de juego y terrible final. No es un remake del original de gamecube PERO TIENE EL MISMO ALICIENTE DE AVENTURA QUE EL PRIMERO, vuelven a secuestrar a mario DE LA MISMA MANERA.
    Fuera de eso, para ser un juego portátil no está mal del todo, salvo por esa forma de dividir el juego en capítulos.

    Y a lo que vamos, el final, me esperaba transformaciones, algo enorme y diferente, no un enfrentamiento tal cual contra king boo la verdad. A pesar de todo, el juego en general me fue muy disfrutable, pero nada comparado con el brillante de gamecube.
    Paz hermano.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En lo de Mario tienes razón, yo mismo lo comento, pero lo de Boo, casi era mejor que se quedara como está a que se transformase en Bowser como en el otro... Aunque él mismo no se transforma, si que lo hace el fantasma que posee las armaduras. Está claro que argumentalmente es donde más falla.

      Eliminar
    2. Coincido con lo de la transformación en Bowser, una de las cagadas más grandes (y creo pensar que para mi la única) del juego original. Pero no nos olvidemos que seguimos en un juego de la franquicia .Bros y, aunque fuera una referencia final no muy acertada, quisieron meter al menos un personaje clásico.

      Igualmente, una merde. Mira que podría haberse transformado en cosas, incluso en un bowser mutante! demasiado plano el final sin duda.

      Eliminar
  2. Ha molado rememorar el tramo final del LM2 xD. Me gustó muchísimo este juego. Tengo el primero pendiente, que en su día no lo jugué porque me daba miedo xDDD.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es que de hecho, el 1 da más miedo que este. Como comento, los fantasmas tienen mucha más personalidad, y no están siendo controlados por nadie. Ya me comentas cuando te lo pases ;)

      Eliminar
  3. Siempre es bueno encontrar un compatriota que además sepa de buenos juegos.
    Pasaba por la inmensa red buscando reseñas de el que ahora es mi juego terminado más reciente, Golden Sun The Lost Age, y pues me terminé topando con este interesante blog.
    Guardare el enlace y haré mis apariciones más seguido. Saludos, compañero.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo que daría yo por borrarme la memoria y poder jugar a Golden Sun 2 como si fuera la primera vez...

      Bienvenido a Ese Gran Final... ^^

      Eliminar
  4. Acabo de pasarme este juego y la verdad es que me ha gustado mucho. Supongo que también habrá influido que no haya jugado al primero, luego no puedo comparar. Y lo de la misión E-4, cuando todos los fantasmas del portal, yo iba son la Succionantes mejorada, y aun así cuesta.

    Para mí, el principal fallo que le vi es que hubiera tan pocos tipos de fantasmas. Ya me percaté cuando al acceder al bestiario fantasmal del juego me encontré con solo 5 páginas o así, 2 de ellas con solo 3 y 1 entradas respectivamente. Y luego encima la mayoría son versiones de otros. Bueno, eso, y lo de la corona. Ahí hay más agujeros que en un colador.

    Respecto a que los fantasmas son buenos, eso hay que cogerlo con pinzas. El propio profesor te dice que los del Valle Sombrío son pacíficos debido a la presencia de la Luna Oscura, que los calma. Por eso, al desaparecer, se vuelven agresivos. No es difícil hacer una interpretación inversa y deducir que los fantasmas per sé son agresivos; y que su comportamiento amigable es consecuencia de la Luna Oscura, y no porque realmente sean así.

    ResponderEliminar